Una investigación del New York Times ha arrojado luz sobre la oscura realidad de la producción de fentanilo por parte del Cártel de Sinaloa. El foco se centra en las figuras de Néstor Isidro Pérez Salas, alias ‘El Nini’, y Jorge Humberto Figueroa Benítez, alias ‘El 27’, acusados de realizar pruebas con fentanilo, no solo en personas, sino también en animales.
Documentos judiciales, parte de una acusación en la Corte del Distrito Sur de Nueva York contra 23 miembros del cártel en abril de 2023, detallan experimentos inhumanos. “En lugar de dispararle, le inyectaron múltiples dosis de fentanilo con menor potencia hasta que, finalmente, tuvo una sobredosis y murió,” se lee en el expediente, refiriéndose a una mujer a la que se le debía ejecutar.
Pero la crueldad no se limita a los humanos. El New York Times reporta que el cártel realiza pruebas en animales para calibrar la potencia de sus mezclas de fentanilo. Según el testimonio de un testigo, un hombre identificado solo como Pedro López, miembros del cártel ofrecían dinero a personas sin hogar para que se les administrara la droga, observando los efectos.
Para aumentar la potencia del fentanilo, dado las restricciones en el suministro de precursores químicos de China, el cártel ha recurrido a combinar el opioide con otras sustancias. Entre ellas, destacan anestésicos dentales y sedantes veterinarios como la xilacina, un tranquilizante hasta 50 veces más potente que la morfina, usado comúnmente en caballos. Esta mezcla, conocida como "tranq dope" o "droga zombie", complica considerablemente el tratamiento de una sobredosis.
“Tú le inyectas esto a una gallina y si tarda entre un minuto y minuto y medio en morir, eso significa que la dosis resultó bastante buena. Si no muere o le toma mucho tiempo, le añadimos xilacina,” reveló un presunto miembro del cártel al New York Times. Esta práctica se extiende a otras especies, como conejos, donde la supervivencia más allá de 90 segundos indica una baja potencia del compuesto.
La información obtenida describe un panorama alarmante, donde la búsqueda de mayores ganancias y la indiferencia por la vida humana y animal se entrelazan en un experimento mortal llevado a cabo bajo las sombras del narcotráfico.