La escena: una gasolinera en el cruce con Avenida Naciones Unidas, en la colonia Villa Verona. Allí, lejos de la fría esterilidad de un quirófano, una joven de 22 años, originaria de Tlajomulco de Zúñiga, se encontró en medio de un parto imprevisto. Su acompañante, según reportes, era su pareja, quien la trasladaba en motocicleta desde la colonia Chulavista con destino al Hospital Zoquipan.
Afortunadamente, la situación se convirtió en un ejemplo de solidaridad ciudadana. Múltiples llamadas al 911 alertaron a la Policía Municipal de Zapopan. Los oficiales llegaron rápidamente a la gasolinera, encontrando a la mujer en plena labor de parto, al aire libre, a un costado del área de oficinas. “Efectivamente es un producto nacido en muy buen estado de salud. Una niña para ser exactos,” comentó el oficial Ali Reynaga, quien ya había sido noticia anteriormente por un acto de ayuda ciudadana distinto.
En la escena, antes de la llegada de la ambulancia, personal con conocimientos de primeros auxilios ofreció apoyo crucial a la madre y a la recién nacida. Este apoyo, se unió al trabajo profesional de la policía, mostrando la mejor cara de la comunidad. Su rápida acción y la presencia de civiles capacitados estabilizaron la situación hasta la llegada de los paramédicos.
Una vez recibida la atención médica especializada, madre e hija fueron trasladadas al Hospital General de Zapopan. Según los informes policiales, ambas se encuentran en condición regular pero estable, con alta médica prevista para las próximas horas. El parto en la gasolinera fue, sin duda, una experiencia que cambió las vidas de todos los involucrados.
La historia resalta la importancia de la preparación ante situaciones imprevistas como un parto prematuro. El IMSS recomienda acudir al hospital si se presentan tres o cuatro contracciones en 30 minutos, o si se experimenta sangrado vaginal, dolor abdominal intenso, salida de líquido amniótico. Es fundamental que la madre acuda acompañada y preparada con el material necesario, siguiendo las recomendaciones médicas.
El incidente en la gasolinera de Zapopan nos deja una enseñanza invaluable: la capacidad de la comunidad para unirse en momentos críticos, demostrando que, incluso en el caos, la solidaridad y la preparación pueden marcar la diferencia entre una emergencia y un final feliz.