El epicentro del incidente: Reforma 300, en la colonia Juárez. Un edificio de 17 pisos que alberga a más de 1500 trabajadores. A las 9:30 de la mañana, un cortocircuito en una subestación eléctrica del sótano desató un incendio, generando una densa columna de humo.
Según la Secretaría de Gestión Integral de Riesgos y Protección Civil (SGIRPC), liderada por Myriam Urzúa, el humo se propagó rápidamente por las rutas de evacuación, provocando 42 casos de intoxicación por humo y crisis nerviosas. La situación requirió una evacuación total del edificio, una operación coordinada y eficiente por parte de los equipos de emergencia.
Las imágenes difundidas en redes sociales mostraban la magnitud del despliegue: bomberos, ambulancias, y una multitud de personas desalojando el edificio de forma ordenada, siguiendo las indicaciones de las autoridades. El control del incendio fue relativamente rápido, pero la experiencia dejó una huella en los empleados.
Entre los afectados, dos personas requirieron hospitalización por inhalación de humo. Mientras tanto, la SGIRPC confirmó que el edificio permanecerá cerrado hasta una revisión completa de sus protocolos de protección civil. Se revisarán con detalle los sistemas de seguridad y se realizarán las adecuaciones necesarias para evitar futuros incidentes. Un análisis exhaustivo permitirá entender completamente lo sucedido y aplicar las medidas correctivas pertinentes.
El incidente, aunque controlado con eficiencia, sirve como recordatorio de la importancia de la preparación y la capacitación en materia de protección civil, tanto para las empresas como para los empleados. Una lección aprendida en medio del caos de un martes laboral en la vibrante y dinámica Ciudad de México.