En la madrugada del viernes, un tráiler que circulaba por la carretera libre Tijuana-Rosarito fue interceptado por autoridades federales, quienes descubrieron que su cargamento no era croquetas para perros, como inicialmente se pensaba, sino una gran cantidad de droga oculta en envases de comida para mascotas.
El cargamento ilícito fue asegurado por la Fiscalía General de la República (FGR), que trasladó el vehículo hasta sus instalaciones en la Zona Río. La operación causó el cierre temporal del bulevar Abelardo L. Rodríguez entre las avenidas Sánchez Taboada y Paseo del Centenario mientras se realizaban las inspecciones correspondientes.
En el operativo participaron elementos del Ejército, la Guardia Nacional y la FGR, quienes colaboraron en la descarga y análisis del cargamento decomisado. Las autoridades no han especificado la cantidad exacta de droga encontrada, pero el hallazgo subraya las complejas rutas utilizadas para el tráfico de sustancias ilegales.
El caso resalta la constante vigilancia de las autoridades federales en la zona, un punto clave para el trasiego de drogas en el país, y la importancia de la colaboración entre las distintas fuerzas de seguridad para frenar el crimen organizado.