AMG: Crisis de accesibilidad en transporte público para discapacitados
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El trasfondo de esta problemática se centra en la aplicación —o mejor dicho, la falta de aplicación— de una norma técnica que exige a las empresas de transporte público contar con al menos el 10% de sus unidades equipadas con rampas para discapacitados. Pero la realidad dista mucho de esta meta.
"En mi caso, soy usuaria de silla de ruedas desde nacimiento y espero hasta más de dos horas para llegar a mi trabajo. Soy madre soltera y la necesidad es urgente," lamenta una afectada. Su testimonio, lejos de ser aislado, refleja una situación generalizada. En muchas rutas, apenas hay tres camiones con rampas funcionales, según reportan varios usuarios.
Una reciente encuesta de satisfacción a usuarios del transporte público arroja cifras alarmantes: el 90% de las personas con alguna discapacidad enfrenta dificultades para usar el servicio de camión. La accesibilidad, simplemente, no existe.
¿A qué se debe esta falta de cumplimiento? Tonantzin Cárdenas, diputada de Futuro, señala que los permisos para la instalación de elevadores y rampas ya fueron otorgados. Sin embargo, las empresas no realizan las adecuaciones necesarias. Peor aún, en muchos casos, las puertas de acceso a las rampas tienen asientos instalados, bloqueando el paso de las personas en silla de ruedas.
Ante esta situación, la diputada Cárdenas ha hecho un llamado urgente al Gobierno de Jalisco y a la Secretaría de Transporte para exigir la regulación y aplicación de las normas. "Exhortamos a Diego Monraz, titular de la Secretaría de Transporte, a emprender las acciones necesarias para que las personas en silla de ruedas dejen de sufrir estas esperas excesivas," reclama la diputada.
Como parte de la búsqueda de soluciones, se llevará a cabo una mesa de trabajo el miércoles 19 de febrero a las 10:00 am en el salón Legisladoras del Congreso de Jalisco. Allí se reunirán usuarios del transporte público, autoridades y legisladores para discutir las experiencias y buscar alternativas para una verdadera inclusión y mejor movilidad en la ciudad.
La problemática, en resumen, no solo se limita a la falta de unidades adaptadas, sino a la falta de voluntad para aplicar las regulaciones existentes y garantizar el derecho a la movilidad de las personas con discapacidad en la AMG. La situación exige una respuesta inmediata y efectiva.