La decisión de la Corte Suprema de Arizona en abril de permitir la aplicación de una ley de 1864 que penalizaba todos los abortos, excepto cuando la vida de la mujer estaba en peligro, desencadenó una serie de eventos. La gobernadora demócrata Katie Hobbs, en un movimiento que considera solo el comienzo de la lucha por la protección de la atención de la salud reproductiva en Arizona, firmó en mayo un proyecto de ley para revocar dicha ley.
Seguiré haciendo todo lo que esté a mi alcance para proteger las libertades reproductivas, porque confío en que las mujeres tomen las decisiones que sean mejores para ellas, y sé que los políticos no pertenecen al consultorio del médico, afirmó Hobbs.
Tras la decisión del tribunal superior, la gobernadora Hobbs instó a la Legislatura estatal a tomar medidas para deshacer la prohibición antes de que entrara en vigor. Sin embargo, los legisladores republicanos, con una estrecha mayoría en ambas cámaras, inicialmente bloquearon las discusiones sobre la derogación. La presión de los demócratas, incluyendo el apoyo de tres republicanos, logró que la legislación de derogación fuera aprobada en la Cámara de Representantes y posteriormente en el Senado, con el apoyo de dos senadores republicanos adicionales.
A pesar de la derogación, la batalla por el aborto en Arizona ha continuado. La senadora estatal demócrata Eva Burch, en un discurso en el pleno en marzo, reveló que iba a abortar debido a que su embarazo ya no era viable. Burch señaló que este era un momento para resaltar el impacto real de las leyes aprobadas por los legisladores en Arizona.
La ley actual en Arizona permite los abortos hasta las 15 semanas. Después de esa marca, existe una excepción para salvar la vida de la madre, pero no se incluyen excepciones para casos de violación o incesto. Los requisitos para acceder a un aborto incluyen una ecografía 24 horas antes del procedimiento y el consentimiento de los padres para menores de edad, excepto en casos de incesto o riesgo de vida.
La decisión final sobre el derecho al aborto en Arizona la tendrán los votantes en las elecciones generales. Una coalición llamada Arizona for Abortion Access ha logrado que se incluya la posibilidad de consagrar el derecho al aborto en la constitución estatal en la boleta electoral. Si los votantes aprueban la medida, se permitirían los abortos hasta la viabilidad fetal, generalmente alrededor de las 24 semanas.
El tema del aborto continúa siendo un punto central en las campañas demócratas en las elecciones de noviembre, con los votantes de Arizona como los encargados de decidir si se consagra el derecho al aborto en la constitución estatal.
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