El incidente ocurrió el martes por la tarde, cerca de la intersección de la calle 16 y McDowell Road, cuando los oficiales se enfrentaron al sospechoso, Saul Bal, de 41 años.
El tiroteo, que dejó a Coolidge en estado crítico y a Haney en recuperación en casa, ha generado un fuerte movimiento de apoyo por parte de la comunidad y las autoridades locales. La Asociación de Policía de Phoenix (PLEA) ha organizado una recaudación de fondos con un BBQ el próximo 10 de septiembre, de 11 a.m. a 9 p.m., en sus oficinas ubicadas en la calle Adams, 1102 W.
Según las autoridades, Bal, quien tiene un historial delictivo violento y antecedentes de posesión ilegal de armas, se enfrentó a los oficiales con disparos luego de que estos lo persiguieran tras su huida del lugar del robo. Uno de los oficiales respondió al fuego, pero Bal no resultó herido. Finalmente, fue arrestado por otros oficiales en la zona.
El incidente ha resaltado la peligrosa realidad que enfrentan los oficiales de policía a diario. La Jefa de Policía de Phoenix, ha destacado el valor y la entrega de Coolidge y Haney, quienes demostraron su compromiso con la seguridad de la ciudad aún a riesgo de sus propias vidas.
Haney, quien fue dado de alta del hospital el miércoles por la noche, recibió un impacto de bala que fue amortiguado por su chaleco antibalas. Sin embargo, Coolidge aún permanece en estado crítico. Ambos oficiales, asignados al distrito de Mountain View, están recibiendo el apoyo de la comunidad y de sus compañeros, quienes se han volcado a expresar su solidaridad y apoyo a sus familias.