La razón detrás de esta medida? Una deuda pendiente desde 2016 que, según la alcaldesa Regina Romero, ha obligado a la ciudad a cambiar sus políticas.
"El expresidente Trump tiene todo el derecho de visitar y llevar a cabo sus mítines en nuestra ciudad, pero es responsabilidad de su campaña pagar por los recursos que se utilizan localmente," declaró Romero a EFE. La seguridad del expresidente y del público asistente a sus eventos es una prioridad para la ciudad, y esta exige un depósito como medida preventiva.
El mitin de Trump está programado para llevarse a cabo en el Centro de Música Linda Ronstadt, con capacidad para un poco más de 2,000 personas. La ciudad implementó su nueva política después de que la campaña de Trump dejara una deuda de $81,837 por los servicios de 180 policías durante un evento en 2016.
"En 2016, la campaña de Trump quedó debiendo a varias ciudades miles de dólares asociados con costos de seguridad en sus mítines en diferentes estados," explicó la Alcaldía de Tucson.
La deuda de Trump no se limita a Tucson. La ciudad de Mesa, Arizona, aún reclama $64,000, mientras que El Paso, Texas, pide $400,000. Tucson intentó recuperar el dinero a través de cartas, pero no recibió respuesta. Esta situación llevó a la ciudad a instaurar la política del depósito, aplicable a todos los políticos, sin importar su partido político.
La exigencia de un depósito es una medida preventiva que busca asegurar la responsabilidad financiera de los eventos políticos en la ciudad. Mientras tanto, el equipo de Trump tendrá que desembolsar $145,000 para garantizar que su mitin en Tucson se lleve a cabo sin problemas, mientras que las ciudades afectadas por las deudas del 2016 esperan recuperar el dinero que les corresponde.