500 soldados de Nueva York se desplazan a Arizona para apoyar la seguridad de la frontera
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Sin embargo, la noticia central gira en torno a 500 soldados del Ejército de Estados Unidos, provenientes de Fort Drum, Nueva York. Estos militares se dirigen a Fort Huachuca, en Sierra Vista, Arizona, a tan solo 15 millas de la frontera con México. Su misión, según un comunicado de prensa, es apoyar las operaciones y mejorar la seguridad en la zona.
La teniente coronel Sarah J. Ray, portavoz de la 10ª División de Montaña, declaró: “La 10ª División de Montaña está lista para desplegar a nuestros soldados. Bajo la dirección del Comando Norte de Estados Unidos, la 10ª División de Montaña desplegará fuerzas listas para apoyar el esfuerzo de tomar el control operativo de la frontera sur.”
Este refuerzo militar se suma a los aproximadamente 1,600 efectivos en servicio activo de diversas ramas militares desplegados a principios de año, y a los cerca de 2,500 que ya apoyaban a la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP). La estrategia, bajo la administración Trump, busca reforzar el control fronterizo.
El Secretario de Defensa, Pete Hegseth, justificó la medida durante su primera visita a la frontera tras asumir el cargo: “En este momento, eso significa un aumento de personal… Hemos visto a miles de tropas en servicio activo y de la Guardia Nacional llegar a la frontera con activos y sistemas adicionales que nos permiten vigilar.”
Hegseth también mencionó planes controversiales, como la posible utilización de la base de Guantánamo para albergar a migrantes: “Cualquier activo necesario en el Departamento de Defensa para apoyar la expulsión y detención de aquellos que se encuentran ilegalmente en nuestro país está sobre la mesa, incluyendo —como se ha informado ampliamente— Guantánamo Bay.”
El contexto internacional tampoco se queda atrás. México, tras amenazas arancelarias de Estados Unidos, ha desplegado 10,000 soldados a su frontera norte. Este movimiento ocurre a pesar de la disminución de la migración y las sobredosis de fentanilo en el último año, con el presidente Trump declarando una emergencia fronteriza a pesar de las estadísticas.
La situación presenta una compleja interacción entre políticas internas de Estados Unidos, la cooperación (o falta de ella) con México, y el continuo desafío de la seguridad fronteriza y el control migratorio. Los detalles sobre el despliegue de los 500 soldados de Nueva York ofrecen una pieza clave en este complejo rompecabezas.