JUPITER, Fla
El dueño de los Marlins niega haber ‘estafado’ a los aficionados.
Un grupo periodistas estaban afuera de los vestidores de los Marlins de Miami, esperando la llegada del dueño del equipo Jeffrey Loria, cuando el jardinero Bryan Petersen pasó junto a ellos.
“¿Alguien se va a casar?”, preguntó.
Pero más bien se trataba de alguien tratando de salvar una relación. La campaña de relaciones públicas de tres días lanzada por Loria para arreglar las cosas con los enfurecidos fanáticos lo trajo el martes a los entrenamientos de primavera para una conferencia de prensa que incluyó varios intercambios agitados antes de que el dueño la interrumpiese.
Loria reiteró muchos de sus comentarios previos sobre la purga salarial del 2012, diciendo que no se trató de dinero, sino de mejorar el talento joven del equipo. Apenas a los 10 minutos de comenzada la conferencia, se molestó cuando alguien le preguntó por qué le deberían creer los fanáticos.
“Me han hecho la misma pregunta de cuatro formas diferentes”, dijo Loria. “Mi respuesta es que hemos agrupado a jugadores capaces de ganar un campeonato. Vamos a tener un excelente equipo en los próximos dos o tres años que los va a enorgullecer”.
Los fanáticos están furiosos de que luego de apenas una campaña de masivos gastos en un nuevo estadio construido mayormente con dinero del contribuyente, los Marlins revirtieron a los presupuestos austeros del pasado. Alguien le preguntó a Loria cómo iba a tratar de cambiar la impresión que el proyecto del estadio fue “una estafa”.
“¿Una estafa? No voy siquiera a responder a eso”, dijo Loria.
Muchos proyectan que los Marlins van a perder alrededor de 100 partidos apenas un año después de ser la comidilla en las mayores y mencionados como candidatos a la postemporada. La nómina de este año va a ser de menos de 45 millones de dólares, comparado con 90 millones en 2012.
Un cambio en noviembre envió a Toronto a los tres jugadores mejor pagados de los Marlins — el torpedero José Reyes y los lanzadores Mark Buehrle y Josh Johnson. En la transacción, Miami adquirió a jóvenes prospectos.
Cuando Loria se alejó de las cámaras luego de 15 minutos, un asistente de relaciones públicas dijo que el dueño respondería a más preguntas.
En lugar de ello, Loria desapareció por una puerta de los vestidores y no regresó.
En algún momento, el equipo va a tener que hablar por sí mismo.