PITTSBURGH (AP) — Justin Fields, quarterback de los Acereros de Pittsburgh piensa que no son un equipo sin identidad, esto después de una derrota por 20-17 ante Dallas que los dejó con marca de 3-2.
“Sabemos quiénes somos”.
Después de otra derrota por poco margen, queda la duda pues el equipo ha tenido muchas preguntas sobre la posición más importante en el emparrillado.
El entrenador en jefe de los Acereros, Mike Tomlin, ha hecho todo lo posible para evitar hacer declaraciones sobre quién es el quarterback titular del equipo, mientras Russell Wilson, quien se ganó el puesto al salir del campamento de entrenamiento, se recupera lentamente de una lesión en la pantorrilla sufrida un par de días antes del inicio de la temporada, poniendo a Fields en una posición complicada. Si bien Tomlin ha elogiado el juego de Fields, en repetidas ocasiones no llegó a nombrar a Fields como titular de tiempo completo, independientemente del estado de Wilson.
Esa decisión ha obligado a estar siempre en cuerda floja, donde cada semana se siente como una especie de prueba.
Tomlin ha tenido complicados momentos con los lentos inicios de su equipo, llevándonos de vuelta a la falta de identidad, con un Tomlin no respaldado como QB dando como resultado una sensación de indecisión. Los Acereros no tienen una identidad particular en parte porque Tomlin no se la ha dado. Tienen dos mariscales de campo muy diferentes, con habilidades muy diferentes, en momentos muy diferentes de sus carreras.
Cuanto antes Tomlin de su respaldo a alguno de los dos, Pittsburgh podrá avanzar con certeza y tal vez construir una base que se sienta más firme.
Si bien la defensiva de Pittsburgh no estuvo en su mejor momento en una noche en la que permitió 445 yardas, Watt sigue siendo la estrella.
En cambio, el juego terrestre figura como algo necesario pues ha sido difícil conseguir yardas en los primeros cinco partidos. Los Acereros están dedicados a correr el balón, pero no lo ejecutan de manera efectiva.
Por lo pronto, es urgente encontrar a un mariscal de campo titular, y quedarse con él, antes de una visita a Las Vegas el domingo para enfrentar a los tambaleantes Raiders.