Mientras los fanáticos celebraban el triunfo, un detalle preocupante empañaba la alegría: la salida de Rodrygo por una lesión muscular en el minuto 85.
El delantero brasileño, pieza clave en el ataque madridista, se retiró del campo con hielo en su pierna derecha, dejando un vacío en el campo que fue cubierto por Aurélien Tchouaméni. La lesión se produjo justo antes de que Rodrygo asistiera a Lucas Vázquez para el tercer gol del Madrid, que les permitió voltear el marcador.
El entrenador Carlo Ancelotti, con la preocupación latente en su voz, mencionó que la participación de Rodrygo en el clásico contra el Barcelona el sábado es "poco probable". El brasileño se someterá a más pruebas para determinar la gravedad de la lesión, y su ausencia sería un duro golpe para el Real Madrid, que se encuentra a tres puntos del líder, Barcelona, en La Liga.