Tras una lesión en el tendón de Aquiles que terminó con su temporada, la pregunta en boca de todos es: ¿qué pasará con Watson?
El gerente general, Andrew Berry, se muestra evasivo. "Eso siempre es posible", respondió con una sonrisa enigmática cuando se le preguntó si Watson volvería a jugar para los Browns. Berry prefiere enfocarse en el presente, en la recuperación de Watson y en mejorar el desempeño del equipo. Sin embargo, es imposible ignorar el elefante en la habitación: el contrato de Watson, de 230 millones de dólares garantizados por cinco años, es una carga para el equipo.
La decisión de los Browns de apostar por Watson, quien ha sido acusado por dos docenas de mujeres de agresión sexual y acoso durante su tiempo con los Texans, ha sido criticada por muchos, y el acuerdo se ha calificado como uno de los peores en la historia de la NFL.
Watson no ha podido cumplir con las expectativas. Sus 19 partidos como titular en Cleveland se han visto interrumpidos por lesiones y una suspensión de 11 juegos por violar el reglamento de conducta personal de la NFL. Aunque ha mostrado destellos de su talento, su rendimiento ha sido irregular.
Los Browns, que enfrentan una dura realidad económica, tienen que decidir si seguirán adelante con Watson. Su salario de 46 millones de dólares por temporada es una carga importante para el equipo. A pesar de su bajo rendimiento, el futuro de Watson en Cleveland sigue siendo una incógnita.