Ball, quien ya había establecido un nuevo récord personal con 38 puntos en el partido anterior, demostró su talento ofensivo desde el primer minuto.
Sin embargo, el Magic no se dejó amedrentar. Franz Wagner, con una actuación brillante, encabezó la ofensiva de Orlando, anotando 32 puntos y mostrando una precisión implacable. Su compañero, Jalen Suggs, también se unió a la fiesta, encestando sus primeros siete tiros, incluyendo tres triples, y contribuyendo con 17 unidades y dos robos. El primer cuarto terminó con una ventaja para Orlando, gracias a la contundencia de su ataque.
En el resto del partido, el Magic mantuvo su ritmo y dominó a los Hornets, que no pudieron mantener la intensidad inicial. LaMelo Ball, a pesar de su esfuerzo, no pudo encontrar la misma fluidez en los siguientes cuartos. Suggs fue una pieza fundamental en el juego del Magic, su eficiencia en el tiro y su defensa fueron claves para la victoria.
El encuentro finalizó con un marcador contundente de 114-89 a favor del Magic, quienes demostraron su superioridad en la cancha. Diabate lideró el rebote para los Hornets con 15, mientras que Williams sumó 15 puntos. La victoria del Magic los posicionó como uno de los equipos a seguir en la NBA Cup.