Celtics vencen a Lakers en thriller; Tatum brilla, lesión de LeBron

Se palpaba la rivalidad, esa tensión que solo un partido entre gigantes puede generar.
El foco se centró rápidamente en Jayson Tatum, quien, con una actuación magistral, guio a los Celtics hacia la victoria. Su desempeño fue excepcional: 40 puntos, 12 rebotes y 8 asistencias, una demostración de fuerza y precisión que dejó boquiabiertos a los aficionados.
Sin embargo, la noche no estuvo exenta de imprevistos. A mitad del último cuarto, y cuando los Lakers, liderados por un LeBron James con 22 puntos, 14 rebotes y 9 asistencias, intentaban una remontada épica, el astro angelino abandonó la cancha por una distensión inguinal. Este imprevisto cambió el curso del juego, aunque la tensión se mantuvo hasta el final.
La reacción de los Lakers, a pesar de la ausencia de James, fue admirable. Reducir una diferencia de 20 puntos a un solo dígito en el último cuarto, demuestra su garra y determinación. Pero la dupla Tatum-Brown resultó imparable. Jaylen Brown, con sus 31 puntos, se unió a Tatum en la arremetida final, anotando los últimos 12 puntos que sellaron el triunfo de Boston 111-101.
La victoria significó la cuarta consecutiva para los Celtics, mientras que los Lakers vieron truncada su racha de ocho triunfos en casa. "Fue una noche de emociones fuertes, una batalla que se decidió en los últimos minutos", se escuchó decir a algunos comentaristas al finalizar el encuentro. En un ambiente cargado de recuerdos, también destacó la actuación de Luka Doncic, quien con 34 puntos y 8 rebotes, regresaba a Boston después de la final de la NBA.
La intensidad de la noche dejó huella, un espectáculo deportivo que se recordará por mucho tiempo, marcado tanto por las brillantes actuaciones individuales como por los momentos de incertidumbre y la fuerza mostrada por ambos equipos.