Mookie Betts: Problema de salud retrasa su debut con Dodgers

Este año, sin embargo, una situación inesperada está acaparando la atención de los seguidores de los Dodgers.
Mookie Betts, el versátil jugador de Los Ángeles Dodgers, se encuentra lidiando con un problema de salud que ha retrasado su debut en la temporada regular. La noticia, inicialmente velada, ha ido tomando forma a medida que se revelan más detalles sobre su estado.
Betts, quien se perdió los primeros juegos de temporada en Japón y regresó a Estados Unidos para su recuperación, se ha visto obligado a ausentarse de varios partidos amistosos. Su declaración a la prensa ha dejado claro el alcance del problema: “Quiero decir, me siento genial. Mi cuerpo se siente genial. He podido hacer ejercicio. He podido hacer prácticamente todo menos comer, lo cual es extraño. Así que los síntomas han desaparecido un poco, nada más que tengo que ver cómo calmar mi estómago”.
La situación es más compleja de lo que parece a simple vista. Betts ha revelado que lleva dos semanas sin poder ingerir alimentos sólidos sin vomitar, lo que le ha ocasionado una pérdida de alrededor de 15 libras. A pesar de esto, afirma que sus análisis de sangre y otras pruebas médicas han resultado normales hasta el momento.
Este inconveniente médico complica su transición a tiempo completo como campocorto, una nueva posición para él después de una larga trayectoria en el jardín derecho y la segunda base. Su ausencia es una gran pérdida para el equipo, considerando su destacado desempeño en la temporada pasada: un bateo de .289 con 19 jonrones y 75 carreras impulsadas, contribuyendo al campeonato de la Serie Mundial de los Dodgers.
Por el momento, su participación en el juego inaugural en Estados Unidos contra Detroit es poco probable. “Es difícil imaginar no comer y jugar un partido”, confesó Betts. “Así que parece que solo voy a estar un poco ligero por un tiempo. Tal vez juegue un poco en desventaja al comienzo de la temporada.” Su regreso al campo dependerá de la evolución de su salud, dejando a los fanáticos en una expectante espera.
La incertidumbre rodea su recuperación, dejando a los Dodgers y a sus seguidores pendientes de cualquier actualización sobre el estado de su estrella. La situación pone de manifiesto la fragilidad de la salud incluso en atletas de alto rendimiento.