Rose sorprende en Augusta: Lidera el Masters tras ronda de 65 golpes

Y las sorpresas llegaron temprano. Justin Rose, a sus 44 años, desató una tormenta de birdies que dejó sin aliento a muchos. Su ronda de 65 golpes, siete bajo par, no solo superó su mejor marca en el Masters, sino que también eclipsó el desempeño de figuras como Scottie Scheffler y Rory McIlroy.
Rose, con tres birdies consecutivos para iniciar y otros tres alrededor del giro, se colocó con una ventaja de tres golpes sobre Scheffler, Ludvig Aberg y Corey Conners. “Cuando juego bien, siento que compito a un alto nivel,” comentó Rose, reconociendo su inconsistencia este año pero destacando la vuelta a su mejor versión. “Mi buen juego es bueno de nuevo. Estoy emocionado por eso.”
Mientras tanto, Scheffler, en su intento por lograr su tercera chaqueta verde en cuatro años, entregó una ronda sólida de 68 golpes sin bogeys. Por su parte, McIlroy, en su anhelo por completar el Grand Slam de carrera, sufrió dos dobles bogeys por errores descuidados, finalizando con un 72. Esta es su séptima participación consecutiva sin romper la barrera de los 70 en la primera ronda del Masters, y optó por no hablar con la prensa después de su juego.
Rose logró una marca histórica en el Masters: es la quinta vez que comparte al menos el liderato después de 18 hoyos, superando el récord de Jack Nicklaus. La diferencia, por supuesto, es que Nicklaus tiene seis chaquetas verdes. Rose también llegó a liderar, al menos en alguna ronda, el Augusta National en ocho ocasiones, un hito alcanzado únicamente por otros cinco jugadores, todos campeones del Masters.
Su excepcional actuación incluyó un birdie de 25 pies para iniciar, y otro de 20 pies en el hoyo 16. Entre medias, una serie de golpes inteligentes y certeros le brindaron múltiples oportunidades de birdie, las cuales aprovechó con maestría. Las condiciones del campo, rápido y firme debido a la lluvia, hicieron de esta jornada una prueba de fuego. El promedio de golpes fue de 73.6, con solo seis jugadores por debajo de 70 y 20 por debajo del par. “Ridículo. Eso es una locura,” dijo Viktor Hovland sobre el desempeño de Rose.
Otros jugadores como Bryson DeChambeau y Tyrrell Hatton, representando a LIV Golf, lograron rondas de 69 golpes. Mientras tanto, Fred Couples, a sus 65 años, se convirtió en el segundo jugador de esa edad en superar el par, con un hoyo en uno del fairway en el 14. En el otro extremo, Nick Dunlap, con un 90, registró la peor puntuación desde Ben Crenshaw en 2015. Diversas situaciones marcadas por la suerte, como la de Hideki Matsuyama, y la inconsistencia de Nicolai Hojgaard, completaron un día de contrastes. Rose, quien se sintió como un lanzador de un juego perfecto, finalizó la jornada con una ventaja significativa, un resultado que proyecta un Masters repleto de emoción.
Rose finalizó con un par y un bogey en los últimos dos hoyos, pero su optimismo sigue intacto. “Tengo 44 años. El golf no se va a hacer más fácil para mí en los próximos cinco, diez años, o lo que sea. Así que las oportunidades son menores en el futuro. Hay que aprovecharlas al máximo”.