Tenis italiano: ¿Quinto Grand Slam en Roma?

Pero el éxito deportivo no es suficiente para Angelo Binaghi, presidente de la Federación Italiana de Tenis y Pádel. Su ambición va mucho más allá de las canchas.
Más allá de los triunfos individuales de jugadores como Lorenzo Musetti y Federico Cinà, y el prometedor futuro que representan figuras juveniles como Tyra Caterina Grant, Binaghi tiene una visión audaz: convertir el Abierto de Italia en el quinto Grand Slam. Una propuesta que desafía un siglo de tradición tenística.
“¿En qué otra parte de la sociedad hay un monopolio que dura más de 100 años? ¿Por qué siempre son cuatro y siempre los mismos cuatro?”, cuestiona Binaghi, frase pronunciada al finalizar la edición 2023 del torneo. Su argumento central se basa en la injusticia y la falta de crecimiento que, según él, implica la exclusividad de los cuatro Grand Slams actuales: Australia, Francia, Wimbledon y Estados Unidos.
El Abierto de Italia, actualmente un torneo Masters 1000, ya ha dado pasos significativos. Ahora se extiende a dos semanas, al igual que los Grand Slams, y su popularidad se ha disparado gracias al auge del tenis italiano. A esto se suma que Italia alberga las Finales ATP hasta 2030 y la Copa Davis los próximos tres años, consolidando su posición como potencia tenística a nivel organizativo. "Ahora somos campeones del mundo tanto en la cancha como a nivel organizativo", afirma Binaghi con orgullo.
La ambición de Binaghi no se limita a Roma. En el pasado exploró la posibilidad de adquirir la licencia del Abierto de Madrid para integrarlo al torneo romano. Incluso, se ha especulado con la posibilidad de que Indian Wells o Miami sean los candidatos a un quinto Grand Slam. Sin embargo, la idea enfrenta resistencia. Jugadores como Alexander Zverev, bicampeón en Roma, admiten la posibilidad, pero cuestionan la aceptación general: "¿Lo van a ver todos como un Grand Slam... la prensa, los jugadores? No lo sé". La opinión de Ons Jabeur, excampeona de Wimbledon y el US Open, es aún más categórica: "necesitamos mejorar la infraestructura actual más que pensar en un quinto Grand Slam".
Mientras la junta de Grand Slam guarda silencio, el Abierto de Italia continúa su transformación. Un nuevo techo retráctil para el Campo Centrale, con un costo de 60 millones de euros, estará listo para 2028, añadiendo 2.000 asientos. Además, el área del torneo se expandió de 12 a 20 hectáreas, incluyendo nuevas canchas como el Stadio dei Marmi, con una arena principal para 3.000 espectadores y dos canchas adicionales con capacidad para 800. El futuro del tenis italiano, y posiblemente del circuito mundial, parece estar en plena ebullición.