Canelo Álvarez queda sin cinturón por primera vez en 10 años tras caer ante Crawford

Canelo Álvarez, el ícono mexicano que llevaba una década reinando en el boxeo, se veía fuera de ritmo frente a un rival que, en teoría, debería ser presa fácil para su estilo demoledor. Pero Terence Crawford no es cualquier peleador.
Con una asistencia récord de 70,482 fanáticos conteniendo el aliento, el combate por el campeonato unificado de peso supermediano se convirtió en un parteaguas. "Intenté de todas las maneras, y entrené muy duro", admitió Álvarez (63-3-2) tras perder por decisión unánime. Sus palabras, inusuales en un peleador acostumbrado a dictar condiciones, resonaron como un eco de vulnerabilidad.
Los detalles que alarman:
El momento revelador llegó en el séptimo round: un derechazo de Crawford hizo tambalear la cabeza de Álvarez, capturando en un fotograma lo que las estadísticas confirmarían después. Aunque el estadounidense evitó festejar desmedidamente -"simplemente creo que fui el mejor hombre"-, su dominio fue tan claro que hasta los jueces lo puntuaron 119-109, 118-110 y 118-110.
Mientras los promotores especulan sobre un posible retiro, Álvarez dejó claro que no piensa colgar los guantes. "Voy a seguir haciéndolo", afirmó. Pero por primera vez desde 2015, lo hará sin un cinturón en la cintura. La pregunta que flota en el aire es si el reloj implacable del boxeo finalmente alcanzó al último gran campeón mexicano de esta era.