Los Ángeles, ca
La cantante no ha dudado en desahogarse sobre los efectos de su divorcio con Brand.
Katy Perry no ha dudado en desahogarse sobre los dramáticos efectos de su divorcio de Russell Brand en su último sencillo, “By the Grace of God”, un tema que expone con claridad la profunda depresión en la que estuvo inmersa Katy Perry por un desengaño sentimental que, como ella misma explica, hizo derrumbar los cimientos de su idealista visión de la vida.
“No voy a mentir y decir que aquellas cosas que no te matan te hacen más fuerte. La verdad es que estuve muy jodi** y sin moverme de la cama en dos semanas, pensando en cosas inimaginables como quitarme la vida para dejar de sufrir. De eso trata básicamente la canción, de lo mucho que me dolió todo y del golpe tan fuerte que me llevé [por el fin de mi matrimonio]”, reveló la estadounidense al suplemento cultural del periódico Sunday Times.
Durante la crisis matrimonial y el consiguiente proceso de divorcio del humorista británico, Katy trataba de disimular públicamente el sufrimiento cultivando su faceta más hedonista gracias al exitoso disco ‘Teenage Dream’: un trabajo optimista y soñador que contrastaba claramente con la profunda tristeza que envolvía la existencia cotidiana de Perry.
“Tan pronto como mi matrimonio se hizo pedazos, sentí que me pegaban un puñetazo en el estómago que me bajaba de la nube”.