México, DF
En la cinta ‘El crimen del cácaro Gumaro’, la actriz interpreta a una mujer que vende películas ilegales.
Luego de haber filmado en nuestro país Las Aparicio el año pasado, la actriz Ana de la Reguera regresa a la cartelera nacional con El crimen del cácaro Gumaro, filme que mezcla la comedia, la farsa, así como la parodia para burlarse del cine mexicano, de los exhibidores, los distribuidores y de la piratería que afecta a nuestro país.
La cinta, que se estrenará en nuestro país el viernes 14, esta veracruzana da vida a Claudianita, una mujer ambiciosa y sin escrúpulos que junto a su novio, vende películas piratas en un lejano pueblito llamado Guépez.
“Me llamó la atención hacer una farsa, algo que yo no había hecho ni visto en el cine. Me gustaba mucho la temática, el homenaje que se le hace al cine, y me gustaba esa crítica que se hace de la piratería.Creo que entre más corrupto sea un gobierno va a haber más piratería. ¿Por qué? Pues porque la gente tiene menos oportunidades, tiene menos dinero, le cuesta mucho ir al cine y tiene que encontrar la forma de divertirse.
“Entonces la gente no tiene la culpa de comprar pirata, pero lo que nos salva y por lo que sigue existiendo el cine y seguimos haciendo cine es porque es toda una experiencia: ir a la sala, que se apague la luz y entres a un mundo desconocido.
“Obviamente nos afecta la piratería, pero a la vez es culpa del gobierno. Todas esas capas de la que habla la película me gustaron”, precisó en entrevista De la Reguera, quien se encuentra trabajando junto a Carlos Carrera un filme sobre la actriz Lupe Vélez.
El crimen del cácaro Gumaro, tercer largometraje de Emilio Portes luego de Conozca la cabeza de Juan Pérez y Pastorela, cuenta la historia de Archimboldo y Gumaro (Alejandro Calva y Carlos Corona), dos hermanos que se reúnen en el pueblo de Guépez tras el accidente de su papá, Don Toribio (Eduardo Manzano).
Ahí se reencuentran con Don Cuino (Andrés Bustamante), un político corrupto que actúa y se mueve según sus intereses. Para darle vida a este sujeto, Andrés Bustamante El Güiri Güiri, quien también funge como guionista junto a Emilio Portes y Armando Vega-Gil se inspiró en algunos políticos mexicanos.
“Cuando iba leyendo el guión empecé a buscarle el tono con el que hablaría... Como es un político añejo, tiene un poquito la patilla onda López Portillo, esa que ya no se usa mucho, tiene la onda de ponerse algo en la azotea para tapar algo (calvicie) que la hace más evidente al peinarse de queso oaxaqueño, usa el típico lente del político de antes que ni es claro ni es oscuro.
Te amo papá” Al ser un filme que le rinde un homenaje a distintas películas, tanto nacionales como internacionales, El crimen del cácaro Gumaro contó con algunos cameos de Xavier López Chabelo, Carmen Salinas, Mónica Huarte, Karla Souza, Johanna Murillo, María Rojo, José María Torre y Jorge Rivero, considerado en la década de los 60 y los 70 un símbolo sexual del cine mexicano, y quien regresó al país después de 30 años de vivir en el extranjero para rodar este proyecto en el que le da vida a un conquistador.
“Me gustó mucho mi personaje de El pajarero, que salía con una chica que chupaba su paleta y a la que le decía que le iba a enseñar el pajarito.
“La parodia que hacen de ese hombre guapo y musculoso es parte de mí y de la vida, y siempre he tenido sentido del humor para burlarme de mí”, acotó el actor de 75 años.