La pareja, que siempre ha sido un referente del amor, admitió que su historia no siempre ha sido un cuento de hadas.
"Creo que cuando llegamos a 2016, estábamos agotados de intentarlo. Ambos estábamos atrapados todavía en nuestra fantasía de lo que pensábamos que debería ser la otra persona (...) Decidimos que nos íbamos a separar por un período de tiempo y tú descubres cómo hacerte feliz y yo descubro cómo hacerme feliz a mí misma", confesó Jada.
La decisión de separarse se mantuvo en secreto por miedo a la presión mediática y el juicio público. "Todavía estamos tratando de descubrir entre nosotros dos cómo ser socios, ¿verdad? Y con respecto a cómo presentar eso a la gente, ¿sabes? Y eso no lo habíamos descubierto", explicó la actriz.
Pese a la separación, Will y Jada nunca se divorciaron, debido a un profundo amor que aún persiste y a la promesa que se hicieron en el altar en 1997. Will Smith lo expresó con estas palabras: "Hice una promesa de que nunca habría una razón para que nos divorciemos. Trabajaremos en cualquier cosa. Y simplemente no he podido romper esa promesa. Estaré a su lado".
Tras dar a conocer la noticia de su separación en 2016, Will Smith envió un correo electrónico a The New York Times para expresar su amor por Jada y su compromiso con la relación: "Cuando has estado con alguien durante más de la mitad de tu vida, surge una especie de ceguera emocional y puedes perder con demasiada facilidad tu sensibilidad a sus matices ocultos y bellezas sutiles".