Su hogar, apodado "The Embassy", es una obra de arte arquitectónica que vale la friolera de $100 millones de dólares.
El cantante nos ha llevado a un tour virtual por su sala de deportes, donde se encuentra una cancha de baloncesto del tamaño de una cancha de la NBA. "Crowned by a 21-square-foot pyramidal skylight", como lo describe Architectural Digest, esta cancha es solo una de las muchas extravagancias que adornan la mansión.
"The Embassy", con sus 50,000 pies cuadrados, es una oda al lujo moderno. Las 40 pies de altura del techo, la entrada de piedra caliza y los pisos de madera exótica son solo algunas de las características que hacen de esta casa un palacio digno de un rey.
Drake, conocido por su gusto por lo exclusivo, no escatima en detalles. Su visión para "The Embassy" fue crear un espacio "monumental" que perdurara por generaciones, y sin duda lo logró.
Sin embargo, no todo es perfecto en el paraíso de Drake. En julio, su casa sufrió inundaciones debido a las lluvias torrenciales en Toronto. En un video compartido en Instagram, se puede ver al cantante caminando por el agua, y en un momento incluso bromea con un Espresso Martini, haciendo gala de su humor característico.
Unos meses antes, la mansión sufrió un robo por parte de un hombre que alegaba querer ver a Drake. El intruso fue detenido por la seguridad y luego entregado a las autoridades bajo la Ley de Salud Mental.
A pesar de estos incidentes, la casa de Drake sigue siendo un símbolo de éxito y lujo. "The Embassy" es más que una casa, es una obra de arte, un testimonio del poder de la música y del espíritu emprendedor de su creador.