En su autobiografía, Melania relata cómo conoció a Trump en 1998, durante la Semana de la Moda en Nueva York, en el famoso Kit Kat Klub. En ese entonces, él tenía 52 años y ella 28. Según su relato, Trump se acercó a ella mientras estaba acompañado por "una atractiva mujer rubia", pero su mirada se posó en Melania, quien se encontraba en la sección VIP.
"Él estaba acompañado por una hermosa acompañante, así que inicialmente descarté nuestra conversación como simples cortesías intercambiadas en un evento de la industria", escribió Melania. Sin embargo, cuando la acompañante de Trump se alejó por un momento, él le pidió su número de teléfono. Melania, en un acto de audacia, le pidió a él su número en cambio. "Guardé la tarjeta en mi bolso antes de que su acompañante regresara a la mesa", explicó.
Días después, Melania llamó a Trump y comenzaron a salir. Este encuentro pinta a Trump como un hombre exitoso y conocido, que buscaba mujeres jóvenes para entretenerse y aumentar su estatus. Melania, sin embargo, evita acusaciones o juicios. No revela la identidad de la mujer rubia ni su relación con Trump, ni tampoco especula sobre sus intenciones al solicitar su número de teléfono.
Melania afirma haber sido "cautivada" por el "encanto y la naturaleza relajada" de Trump, y describe cómo se enamoró de un hombre cariñoso que llamaba a sus médicos personales para asegurarse de que estaba sana.
La ex Primera Dama no revela todos los detalles de su relación con Trump, pero sí ofrece breves glimpses de su vida juntos: bailando al ritmo de Elton John en su sala de estar, cocinando para él y emocionada de decirle "Vas a ser papá".
En alrededor de 180 páginas, Melania ofrece a los lectores un vistazo a su vida privada, notoriamente reservada. Sin embargo, evita ahondar en los aspectos más controvertidos de su relación con Trump, como el supuesto romance con Stormy Daniels mientras Melania estaba embarazada.