A sus 54 años, el magnate del hip-hop enfrenta acusaciones serias de violencia y agresión sexual que podrían llevarlo a prisión de por vida.
El caso ha adquirido un carácter particularmente complejo, con acusaciones que se remontan a 2008 y una red de asociados que supuestamente silenciaban a las víctimas.
"Es un caso de poder y abuso de poder", declaró la abogada Gloria Allred, quien representa a varias de las acusadoras de P. 'Diddy'. "Muchas de las víctimas han sufrido un trauma considerable", agregó, describiendo el impacto del caso en la salud mental de Thalia Graves, una de las mujeres que acusa a 'Diddy'.
El juicio, programado para abril o mayo, promete ser explosivo. Se espera que los abogados presenten argumentos sobre el consentimiento, con los defensores de Diddy argumentando que las relaciones consensuales no deberían ser criminalizadas.
Un punto crucial en el juicio será la posible aparición de Casandra "Cassie" Ventura, la exnovia de 'Diddy'.
Ventura llegó a un acuerdo de confidencialidad un día después de presentar una demanda contra Combs, acusándolo de violación y abuso. Sin embargo, Allred señala que, aunque existen acuerdos civiles, siempre hay excepciones legales que permiten que los testigos sean citados en un tribunal.
Mientras tanto, la batalla por la fianza continúa. Dos jueces han determinado que 'Diddy' representa un peligro para la comunidad, rechazando un paquete de fianza de $50 millones.
Allred advierte que, en casos de alto perfil, puede haber consecuencias para aquellos que amenazan a los testigos, recordando el caso de R. Kelly.