Esa es la imagen que proyecta Tabitha Willett, ex estrella de "Made in Chelsea", en sus redes sociales. Sin embargo, esta fachada de lujo se ha visto empañada por una situación bastante menos glamurosa.
Willett, de 32 años, fue demandada por su arrendadora, Charlotte Hill, por los daños que causó en un apartamento de lujo en Kensington, Londres. La propiedad, valorada en 1.8 millones de libras, fue rentada por Willett durante ocho meses, de marzo a noviembre de 2022.
Durante su estancia, Willett dejó manchas de maquillaje y dibujos en las paredes, perforó agujeros para colgar cuadros y una televisión, manchó una alfombra de 9,000 libras con orina de perro y dañó una placa de cocción.
Hill, quien reside en Mónaco, presentó una demanda contra Willett por los daños a la propiedad y la falta de pago de la renta. En una audiencia de un día en la corte de Londres, Hill describió la situación como "una pesadilla", y mencionó que "el apartamento estaba completamente destrozado y me encontré con una inquilina que no había pagado y con manchas de orina de perro en la alfombra; no es una situación agradable".
Willett, quien participó en la serie de "Made in Chelsea" de 2018, presentó una contrademanda por acoso, pero fue desestimada por la corte.
La corte ordenó a Willett pagar 4,749 libras a su arrendadora por los daños al apartamento. Además, se descubrió que Willett no había pagado la renta del apartamento de dos habitaciones en Onslow Gardens, que costaba 3,500 libras al mes.
El padre de su hija, Fraser Frank Carruthers, es dueño de un club nocturno y un antiguo amigo del Príncipe Harry. La pareja ya no está junta.