Recientemente, la ex estrella de "Celebrity Big Brother" viajó a la ciudad turca para someterse a un nuevo procedimiento: su quinto lifting facial.
La decisión de Alves no fue tomada a la ligera. Después de disolver los rellenos dérmicos que había usado durante años, se dio cuenta de que la piel de su rostro se había vuelto excesivamente flácida. "Podía pellizcarme la piel y salían cuatro pulgadas", reveló Alves. La solución: un "ponytail facelift", un procedimiento mínimamente invasivo que utiliza grapas en la línea del cabello para tensar la piel de la cara y el cuello.
El Dr. Cagdas Orman, reconocido cirujano plástico que ha trabajado con figuras como Katie Price, fue el encargado de llevar a cabo la intervención. Alves, quien ha gastado más de un millón de libras esterlinas en más de 100 procedimientos estéticos, asegura que esta será su última cirugía. "Estoy súper feliz con el trabajo del Dr. Orman", dijo Alves, quien se mostró visiblemente contenta tras la operación.
Sin embargo, Alves no dejó de enviar un mensaje a las nuevas generaciones. "La mayoría de las mujeres que comenzamos a usar rellenos faciales hace 20 años los estamos disolviendo ahora", explicó. "Este ácido hialurónico no nos hace lucir más jóvenes, en realidad nos hace parecer mayores. Nos da una cara redonda y abultada", advirtió.
Alves, quien a sus 41 años ha experimentado de primera mano los efectos de los procedimientos estéticos a largo plazo, recomienda que se tomen decisiones conscientes e informadas sobre la transformación física. "No se trata de luchar contra la edad, sino de aceptarnos tal y como somos", finalizó.