En una entrevista con la revista GQ, el actor de 28 años reveló una inquietante verdad: "Siempre he estado convencido de que no voy a vivir una vida larga". Su confesión sorprendió a muchos, y es que Mescal no se ve a sí mismo como un hombre de 80 años. "Es solo una corazonada", afirmó.
"También tengo miedo a la muerte, así que creo que si la muerte viniera por mí a los 55 años, tendría el mismo miedo que si fuera a los 90. No creo a nadie que diga 'estoy listo para ello'", explicó. Esta confesión, cargada de una cruda realidad, no solo refleja la incertidumbre que todos enfrentamos ante lo inevitable, sino también la presión que la fama y el constante escrutinio público pueden generar.
Mescal, quien saltó a la fama por su papel en "Normal People", ha aprendido a lidiar con el acoso mediático, especialmente en torno a su vida privada. "He aprendido que ahora hay ciertas líneas en la arena que simplemente van a ser impenetrables por el beneficio de mi propia cordura", dijo.
Su relación con la cantante Gracie Abrams, de 25 años, se ha convertido en un tema recurrente en los tabloides. "No me siento cómodo permitiendo ningún acceso a esa parte de mi vida", enfatizó. Mescal parece haber llegado a un punto donde busca proteger su espacio personal, una decisión que podría estar influenciada por el miedo a la muerte que lo persigue.
Mientras se prepara para el estreno de "Gladiator II", Mescal se encuentra navegando entre las exigencias de la fama, el miedo a la muerte y la búsqueda de un equilibrio en su vida personal.