Aunque su decisión ha causado conmoción entre sus seguidores, Grande asegura que la música siempre será una parte fundamental de su vida. "Siempre voy a hacer música, siempre voy a subirme al escenario, siempre voy a hacer cosas pop, lo prometo", afirmó en un podcast reciente. Sin embargo, la artista ha decidido explorar nuevos horizontes, reavivando su pasión por el teatro, su primer hogar artístico.
"Es mi corazón", confesó Grande, quien a los 15 años comenzó su carrera en el musical de Broadway "13". La experiencia de interpretar a Glinda en "Wicked" le ha demostrado que hay espacio para nuevos retos y le ha permitido conectar con su faceta de actriz. "Algunos miembros de mi equipo en ese momento me decían: ‘Ni siquiera deberías hacer una audición’, y yo les respondía: ‘No lo entiendes, por supuesto que tengo que hacerlo. Esto es algo que hay que ganarse’", dijo Grande al New York Times.
La decisión de Grande no ha sido fácil, especialmente después de una carrera musical que la ha llevado a lanzar seis álbumes en siete años. Sin embargo, la cantante busca un nuevo camino, reconectándose con la comedia y la interpretación, lo que considera una forma de sanación. "Me encantaría hacer cualquier cosa que tenga sentido, cualquier papel que consideremos adecuado o en el que pueda hacer un buen trabajo o respetar el material", explicó.
Grande se encuentra en un momento de redescubrimiento, volviendo a sus raíces para encontrar una nueva expresión artística. Su decisión de priorizar el teatro y la actuación, dejando un poco de lado la música, es una muestra de valentía y autenticidad, recordándonos que la mejor manera de avanzar a veces es volver al punto donde todo comenzó.