Pero más allá de las marcas de alta costura que viste, hay una historia detrás de cada elección. Hathaway no se limita a seguir tendencias, las reinventa. Un claro ejemplo es su look en la MET Gala de 2023, donde homenajeó a Karl Lagerfeld con un diseño de Versace en tweed, adornado con cristales de Swarovski. Este diseño, que se complementó con joyas de Bvlgari, logró capturar la esencia del estilo icónico del diseñador, dejando claro que Hathaway no solo entiende la moda, sino que la honra.
No es de extrañar que su estilo se haya convertido en un referente para muchas. Ella es una maestra del equilibrio, capaz de transitar con igual seguridad desde el glamour de un vestido de lentejuelas de Armani Privé hasta la rebeldía de un look "denim" de Ralph Lauren, como el que lució en la última edición de los MTV Video Music Awards.
Cada elección suya es una declaración de intenciones, un testimonio de su propia personalidad y una prueba de que la moda puede ser una poderosa herramienta para expresar la identidad y destacar en cualquier ocasión.