La duquesa de Gales, de 42 años, asistió a la ceremonia militar en el Cenotafio, un monumento a la guerra en Londres, el domingo. Un día antes, había estado presente en un acto de homenaje a los soldados británicos en el Royal Albert Hall. Su presencia en estos eventos conmemora el Día del Armisticio de la Primera Guerra Mundial, el 11 de noviembre.
Kate Middleton, junto a su esposo, el príncipe William, heredero de la corona, presenciaron la ceremonia desde el balcón de un edificio gubernamental con vistas al Cenotafio. Su presencia se destacó aún más por la participación del Rey Carlos III, quien también ha estado luchando contra un cáncer no especificado.
El monarca, de 75 años, colocó la primera corona de flores en el Cenotafio, reconociendo a los caídos en conflictos desde la Primera Guerra Mundial. La ceremonia incluyó dos minutos de silencio, un momento de reflexión que se repitió en monumentos de guerra a lo largo de todo Reino Unido.
En un gesto histórico, Michelle O'Neill, ministra principal de Irlanda del Norte, se convirtió en la primera figura importante del Sinn Fein en asistir al evento. El Sinn Fein, partido que aboga por la unidad de Irlanda, fue el brazo político del IRA durante el conflicto de tres décadas en Irlanda del Norte. O'Neill señaló que su asistencia representa su compromiso de "superar las viejas divisiones y construir puentes".