A sus 78 años, el director ha revelado que su lucha contra el enfisema, resultado de décadas de tabaquismo, ha limitado drásticamente su capacidad para realizar actividades cotidianas.
Desde que comenzó a fumar a la temprana edad de 8 años, Lynch ha enfrentado las consecuencias de este hábito. En una reciente entrevista con la revista People, el cineasta describió su situación actual: “Apenas puedo atravesar una habitación. Es como si caminara con una bolsa de plástico alrededor de la cabeza”. Este diagnóstico, que recibió en 2020, lo llevó a una dura realidad: necesitaba oxígeno suplementario para llevar a cabo tareas básicas.
El creador de Twin Peaks no dejó de fumar hasta dos años después de su diagnóstico, cuando su salud se volvió crítica. “Vi la escritura en la pared y decía: ‘Vas a morir en una semana si no lo dejas’”, compartió. Esta revelación marcó un punto de inflexión en su vida, obligándolo a replantear su relación con el tabaco, que había sido una parte integral de su identidad como artista.
La enfermedad ha tenido un impacto significativo en su vida profesional. Aunque no puede dirigir en un set de filmación, Lynch ha expresado su interés en trabajar de manera remota. Su última película, Inland Empire, se estrenó en 2006, y su más reciente proyecto importante fue la continuación de Twin Peaks en 2017. A pesar de las limitaciones físicas, el director sigue explorando nuevas formas de expresión artística desde la comodidad de su hogar.
El tabaquismo ha sido un tema recurrente en su obra, con personajes que a menudo aparecen fumando. Sin embargo, Lynch aclara que nunca buscó romantizar este hábito. En su cameo en The Fabelmans de Steven Spielberg, donde interpretó a John Ford, el acto de fumar se convirtió en un recordatorio de su lucha personal. “Disfruté mucho fumando... pero hay un precio que pagar por este disfrute”, reflexionó en una publicación en redes sociales.
A pesar de las adversidades, Lynch continúa trabajando en proyectos creativos que puede realizar desde casa, incluyendo cortometrajes y colaboraciones musicales. Su historia no solo es un testimonio de su resiliencia, sino también una advertencia sobre los peligros del tabaquismo. “Realmente quería transmitir esto: piénsenlo. Pueden dejar estas cosas que terminarán matándolos”, concluyó, dejando una huella de reflexión en quienes lo siguen.