Según César Galicia, sexólogo y escritor, la causa de que un problema personal se convierta en debate nacional son las "relaciones parasociales" que establecemos con los artistas. Estas relaciones se refieren al vínculo que establecemos con una celebridad donde sabemos tanto de su vida que creemos que conocemos a esa persona.
En el caso de Nodal y Ángela Aguilar, la narrativa de su relación se ha convertido en un espectáculo que ha generado una gran cantidad de comentarios y especulaciones. Sin embargo, como señala Paola Aguilar, educadora sexual, el relato que se nos cuenta en esta historia no necesariamente es positivo. "Hay una frase de la investigadora Esther Perel que dice que la infidelidad es un tabú universalmente condenado y al mismo tiempo practicado. Entonces, al volverlo un espectáculo estamos diciendo que la infidelidad es tan excepcional que hay que comentarlo, como si no ocurriera en nuestra propia historia."
La forma en que las redes sociales han forjado las discusiones para la Generación Z también ha influido en la forma en que se percibe la relación entre Nodal y Ángela Aguilar. Según Paulina Millán, profesora de la escuela de Humanidades y Ciencias Sociales del Tecnológico de Monterrey, las redes sociales han creado un entorno polarizado donde la verdad se dicta desde la cámara de eco y donde toda la información proporcionada por los algoritmos nos dice quién es la víctima.
En este sentido, la relación entre Nodal y Ángela Aguilar se ha convertido en un ejemplo de cómo la industria del entretenimiento y las redes sociales pueden influir en la forma en que percibimos la realidad. Como señala Millán, "vivimos tiempos complejos. Con un feminismo y un patriarcado igualmente latente e intenso, en un contexto donde se habla del fin del mundo por el medio ambiente o las guerras, y con todo esto pasando nos detuvimos en este caso y tiene que ver con lo anterior: con la sobrevigilancia, con el miedo a experimentar."
En resumen, la relación entre Nodal y Ángela Aguilar es un ejemplo de cómo la industria del entretenimiento y las redes sociales pueden influir en la forma en que percibimos la realidad. Es importante recordar que detrás de la polémica y la especulación, hay personas reales que están involucradas en una historia compleja.