Muere el comediante británico Duncan Norvelle a los 66 años

Sin embargo, su vida cambió drásticamente en 2012 cuando sufrió un derrame cerebral que lo dejó paralizado en la mitad de su cuerpo.
Después de una larga y difícil recuperación, Norvelle se convirtió en un defensor de la conciencia sobre la salud y la importancia de controlar la presión arterial. En una entrevista, dijo: "I saw a lot of stroke patients give up and not question what the doctors were saying to them but I was determined to get better and live my life". Su determinación y espíritu de lucha lo llevaron a regresar a los escenarios después de más de tres años de ausencia.
La noticia de su fallecimiento a los 66 años ha sido recibida con tristeza por la comunidad de la comedia y sus fans. La socialite Lizzie Cundy fue una de las primeras en rendir homenaje a Norvelle, escribiendo en Twitter: "Very sad to hear comedian Duncan Norvelle has passed away. His famous trade mark saying, chase me chase me use to make me laugh so much. Sending all my love and thoughts to his family".
La vida de Norvelle estuvo marcada por su pasión por la comedia y su determinación para superar los obstáculos. Después de su derrame cerebral, se sometió a 18 meses de rehabilitación en el hospital para recuperar su habla y movilidad. Su experiencia lo llevó a descubrir que su presión arterial era extremadamente alta, uno de los factores que contribuyeron a su derrame cerebral.
En 2015, Norvelle eligió el Embassy Theatre en Skegness como su primer lugar de actuación después de más de tres años fuera de los escenarios. En ese momento, prometió que los fondos de su show se destinarían a la Asociación de Derrame Cerebral. Su legado como comediante y defensor de la salud seguirá viviendo en la memoria de sus fans y colegas.
Entre sus logros más destacados se encuentra su participación en el programa de variedades de ITV "Saturday Royal" en la década de 1980. Su estilo único y su capacidad para hacer reír a la audiencia lo convirtieron en un nombre familiar en la televisión británica.
La vida de Norvelle fue un ejemplo de determinación y espíritu de lucha. A pesar de los obstáculos que enfrentó, nunca se rindió y siguió adelante con su pasión por la comedia y la vida. Su legado seguirá inspirando a futuras generaciones de comediantes y fans de la comedia.