Hablando de evolución, hay una figura clave que ha estado detrás de algunos de los mayores éxitos del pop internacional en los últimos años, y su experiencia es tan fascinante como la de sus pupilos.
Se trata de Eric Vetro, un coach vocal de 68 años con una trayectoria impresionante. Su lista de clientes incluye nombres como Ariana Grande y Shawn Mendes, pero hay una artista en particular que ha llamado la atención recientemente por su evolución musical: Sabrina Carpenter.
Vetro, quien trabaja con Carpenter desde que tenía 12 años, afirma que la transformación de la cantante de “Espresso” de estrella Disney a ícono pop no le sorprendió en absoluto. “Siempre tuvo un sentido del humor divertido, un poco atrevido”, comenta Vetro a la revista PEOPLE. “No me sorprendió porque no sucedió de golpe”.
El ascenso meteórico de Carpenter se consolidó este año con el lanzamiento de su sexto álbum, Short n' Sweet, el cual debutó en el número 1 del Billboard 200. Este éxito se sustenta en sencillos como "Espresso" y "Please Please Please", pero también en canciones con letras más explícitas que sus trabajos anteriores, temas como "Bed Chem" y "Juno".
Pero para Vetro, este cambio es una evolución natural. Recuerda a una joven Carpenter, de 16 o 17 años, “con una presencia escénica impresionante, como toda una profesional”. La faceta “pícara” de su personalidad, siempre estuvo presente según Vetro, manifestándose ahora con un toque de sensualidad en su música. Él destaca que Carpenter “mantiene la elegancia incluso en sus momentos más atrevidos. Es sexy y divertido, todo con insinuaciones”.
Actualmente, Carpenter se encuentra en su gira mundial Short n' Sweet Tour, que la ha llevado a escenarios de gran envergadura por primera vez como artista principal. Mientras tanto, Vetro comparte su conocimiento con el público a través del curso "Sing Like the Stars" de BBC Maestro, donde también participan artistas de la talla de John Legend y Marissa Jaret Winokur. La experiencia de Vetro, un testimonio de la evolución de la música pop y el crecimiento artístico de Sabrina Carpenter, demuestra que el éxito requiere mucho más que talento; requiere un guía experto que sepa cómo desarrollar el potencial de sus artistas.