Hablamos de Pamela Anderson, la icónica actriz de Baywatch, quien a sus 57 años, no solo está acaparando titulares por su aparición junto a Andrew Garfield (41 años, sin camisa) y Mikey Madison (25 años, con un atuendo de lencería audaz) en la portada de la revista W Magazine para su prestigioso portfolio "Mejores Actuaciones 2025", sino que también está recibiendo un reconocimiento crítico sin precedentes.
La sesión fotográfica, en la que Pamela luce elegante en un abrigo clásico y medias opacas, es solo un anticipo de la ola de elogios que ha recibido por su papel protagónico en The Last Showgirl. Esta película, con un 81% de críticas positivas en Rotten Tomatoes, narra la historia de Shelly, una glamurosa vedette que debe replantear su futuro tras el cierre de su espectáculo después de 30 años.
"He sentido que me han subestimado, que no me han dado la oportunidad de mostrar mis talentos", confesó Pamela en una entrevista, añadiendo: "Siento que esto es solo el comienzo. Tengo mucho más que dar. Soy capaz de mucho más de lo que alguna vez creí poder hacer en el pasado."
Su interpretación ha generado una ola de comentarios positivos. Pete Hammond de Deadline aseguró: "Anderson es extraordinaria en este papel, que se ajusta a su propio optimismo natural pero también le da la oportunidad de mostrar sus emociones al descubierto. Te romperá el corazón." Mientras que el crítico de Variety, Peter Debruge, calificó la actuación de Jamie Lee Curtis como "una fuerza de la naturaleza".
El estreno limitado de The Last Showgirl en Los Ángeles el 13 de diciembre, como parte de la carrera para los premios, y su estreno a nivel nacional el 10 de enero de 2025, ha generado especulaciones sobre una posible nominación al Oscar para Pamela. Su nominación al Globo de Oro en la categoría de Mejor Actriz - Drama, compartiendo la lista con otras actrices mayores de 50 como Demi Moore (62 años), Nicole Kidman (57 años) e Isabella Rossellini (72 años), sólo refuerza esta posibilidad. La película también cuenta con un elenco de lujo que incluye a Kiernan Shipka, Brenda Song y Jason Schwartzman.
Pamela, quien admite haber tomado clases de actuación en privado y aprovechar este papel para mostrar todo su potencial, ha declarado: "No tengo nada que perder. ¿Y si esta es la última película que hago, o la única que hago?". Su historia transciende la pantalla, convirtiéndose en una poderosa narrativa de perseverancia y autodescubrimiento.