Ariana Grande y Ethan Slater, compañeros de reparto en la aclamada adaptación de Wicked, dejaron atrás las especulaciones y se mostraron públicamente como pareja, derrochando complicidad y afecto. Sus gestos cariñosos, captados por las cámaras, hablan por sí solos. Imágenes de abrazos, caricias y miradas cómplices inundaron las redes sociales.
La cantante, de 31 años, deslumbró con un vestido rosa personalizado de Loewe, un diseño sin espalda que realzaba su figura y reflejaba la magia de su personaje en la película. Slater, de 32 años, elegante con un traje negro, optó por un look más relajado, sin corbata, complementando el estilo de Grande. Ambos desfilaron juntos por la alfombra roja, compartiendo momentos con el resto del elenco, entre los que se encontraban Cynthia Erivo y Michelle Yeoh.
La noche fue especialmente exitosa para la dupla. Erivo y Grande recibieron el premio a la Mejor Colaboración Creativa, mientras que Wicked se alzó con el galardón a Mejor Película y Jon M. Chu, el director, con el de Mejor Director. La presencia de Slater, sin embargo, no pasó desapercibida, especialmente considerando su ausencia en la reciente ceremonia de los Globos de Oro a la que asistió Grande.
El romance entre Grande y Slater, confirmado por Page Six, comenzó después de que ambos finalizaran sus respectivos matrimonios en julio de 2023. Grande se separó de Dalton Gomez tras dos años de matrimonio, mientras que Slater se divorció de Lilly Jay tras casi cuatro años. Esta cronología ha generado controversia, especialmente tras las declaraciones de Jay en una reciente publicación, donde detalla la dificultad de afrontar el divorcio “repentino” y la crianza de su hijo de 2 años a la sombra de la nueva relación de Slater.
Grande, por su parte, ha negado las acusaciones de infidelidad, defendiendo públicamente a Slater en una entrevista con Vanity Fair del pasado septiembre, donde lo describió como una persona con un “corazón excepcional”.
La pareja, que ha aparecido en algunos eventos promocionales de la película, ha mantenido su vida privada apartada del ojo público. Sin embargo, su presencia en los Premios de la National Board of Review marca un nuevo capítulo en su historia de amor, lejos del revuelo mediático, pero sin dejar de ser noticia.