Paul Reubens, el inolvidable Pee-wee Herman, es un ejemplo perfecto. Su nombre, sinónimo de una era dorada de la comedia infantil, ha sido noticia recientemente gracias a un documental póstumo de HBO, dirigido por Matt Wolf. Este trabajo, presentado en el Festival de Sundance, revela aspectos inéditos de la vida del actor, fallecido en julio de 2023 a los 70 años a causa de un cáncer.
El documental, compuesto por dos partes, recoge 40 horas de entrevistas, ofreciendo un panorama profundo e íntimo de Reubens. En ellas, el actor confiesa haber sido "secretivo sobre su sexualidad, incluso con sus amigos". Una confesión que, aunque llega tras su partida, arroja luz sobre las complejidades de su vida.
Reubens habla abiertamente de su conflicto interno: "Era odio a sí mismo o autoconservación", afirma en una de las citas más reveladoras del documental, describiendo la tensión entre su orientación sexual y la construcción del personaje que lo catapultó a la fama. "Estaba fuera del clóset, y luego volví a entrar. No perseguía la carrera de Paul Reubens, perseguía la carrera de Pee-wee Herman".
La relación con su novio Guy, antes de su ascenso a la fama en Hollywood, juega un papel crucial en la narración. La muerte de Guy por SIDA, un suceso que Reubens relata con emotividad, parece haber influido significativamente en su decisión de mantener su orientación sexual en privado. Incluso, la peculiar frase "Mmmm! Buttery!", característica de Pee-wee, surge de inspiración en Guy.
El documental también aborda los escándalos que marcaron la carrera de Reubens: su arresto en 1991 por exhibicionismo y, años después, las acusaciones por posesión de imágenes consideradas pornografía infantil (posteriormente retiradas). Estos eventos, según Reubens, fueron consecuencia directa de ocultar su verdadera identidad. "Perdí el control de mi anonimato. Fue devastador", confiesa.
La estrategia de relaciones públicas para mitigar el daño incluyó una imagen cuidadosamente orquestada de Reubens con una mujer, apariciones en programas nocturnos, y hasta una presentación como Pee-wee en los MTV Music Awards. A pesar de estas acciones, las consecuencias negativas persistieron a lo largo de su vida.
La historia de Reubens, contada a través de sus propias palabras y la perspectiva del director, ofrece una mirada compleja y humana a un icono de la comedia, dejando una profunda reflexión sobre la presión, las contradicciones, y el costo de la fama.
El documental finaliza con un mensaje de audio póstumo, grabado por el mismo Reubens poco antes de su fallecimiento: "Toda mi carrera, todo lo que hice y escribí, se basó en el amor". Un legado que trasciende las pantallas y nos recuerda la importancia de la autenticidad.