La noche del viernes, entre las notas musicales y el brillo del escenario, Ryan Reynolds, el siempre ingenioso actor, hizo una aparición sorpresa. Su presencia, entre la audiencia, se convirtió en un inesperado Q&A, un momento íntimo e informal con un público expectante.
Reynolds, con su característico humor, aprovechó la oportunidad para rendir un emotivo homenaje a su amigo, Hugh Jackman. “Este fue el primer gran astro con el que trabajé, hace 16 o 17 años en X-Men Origins: Wolverine. Era joven, impresionable, y realmente no sabía qué esperar. Pero lo que vi fue lo mejor que alguien podría experimentar al ascender en la industria,” recordó Reynolds según People. Habló de la gentileza y la consideración de Jackman hacia cada miembro del equipo, detalles que dejaron huella en el joven actor.
El evento, sin embargo, no fue solo una muestra de amistad entre dos estrellas de Hollywood. La inesperada aparición de Reynolds se produjo horas después de un giro dramático en la batalla legal que enfrenta con Justin Baldoni y su esposa Blake Lively.
La pareja, a través de su abogada Esra Hudson, reiteró su solicitud de una orden de restricción para evitar “declaraciones extrajudiciales” por parte del equipo legal de Baldoni. En una carta dirigida a la jueza Lewis J. Liman, Hudson argumentó que la conducta de los abogados de Baldoni “perjudica los procedimientos de este Tribunal”.
La misiva detalla una presunta campaña de desprestigio contra Lively, incluyendo la manipulación de medios de comunicación y redes sociales. Se alega que estas acciones han continuado incluso después de la presentación de la demanda inicial. La carta insinúa una campaña de desprestigio sofisticada e “intratable” dirigida a la actriz.
Esta batalla legal se intensificó tras la publicación de un vídeo por parte de DailyMail.com, mostrando escenas del rodaje de "It Ends With Us". Un vídeo que, según el equipo de Lively, respaldaba sus alegatos de acoso sexual por parte de Baldoni, mientras que la defensa lo presenta como parte de una escena consensuada.
Mientras tanto, la contrademanda de Baldoni, por 400 millones de dólares, acusa a Lively de utilizar su influencia para sabotear su carrera, presentando una versión muy distinta de los hechos. Se incluye la descripción de una confrontación donde Lively, aludiendo a su fama y amistades, intimidó a Baldoni.
La situación es un complejo entramado de acusaciones, contrademandas y revelaciones que han mantenido a la opinión pública en vilo. El contraste entre la cordialidad pública entre Reynolds y Jackman, y la ácida batalla legal que involucra a Lively y Baldoni, es un ejemplo de las paradojas del mundo del espectáculo.