Fue la periodista Ana María Alvarado quien dio a conocer la noticia, a través de sus redes sociales: “Falleció la actriz Alma Rosa Aguirre, en La Casa del Actor, rodeada del cariño de sus compañeros, mi más sincero pésame a su hermana Elsa. Descanse en paz”. Un mensaje breve, pero cargado de una emotividad que refleja el impacto de la pérdida.
La confirmación oficial llegó poco después, a través de un comunicado de la propia institución: “Con gran pesar comunicamos el deceso de nuestra querida compañera y admirada actriz Alma Rosa Aguirre, quien falleció anoche en La Casa del Actor, rodeada del cariño y respeto de sus compañeros… Descanse en paz”. Las palabras transmiten la profunda tristeza que embarga a la comunidad artística.
Alma Rosa Aguirre, nacida el 19 de febrero de 1929 en Ciudad Juárez, Chihuahua, fue una figura emblemática del Cine de Oro Mexicano. Su trayectoria, que se extendió por décadas, la llevó a compartir créditos con gigantes de la pantalla grande.
Trabajó junto a luminarias como Sara García, Los Hermanos Soler, Rubén Rojo, Joaquín Pardavé, Abel Salazar, Manolo Fábregas, Luis Aguilar y Pedro Armendáriz. Su presencia en películas icónicas como El Pecado de Ser Mujer y Ama a tu Prójimo la consagró como un ícono inolvidable. No podemos olvidar que también fue hermana de la también reconocida actriz Elsa Aguirre, creando así una dinastía en la industria cinematográfica nacional.
La partida de Alma Rosa Aguirre deja un vacío en el cine mexicano, un vacío que solo el recuerdo de su talento y legado podrá llenar. Su nombre permanecerá por siempre en la memoria de los amantes del cine clásico, un recuerdo de una época dorada y de una actriz que supo brillar con luz propia.