El pasado domingo, durante el Super Bowl, un anuncio publicitario sorprendió a millones. Se trataba de una campaña de Ye (anteriormente conocido como Kanye West), promocionando su sitio web de Yeezy. Sin embargo, lo que inicialmente parecía una campaña publicitaria estándar, dio un giro inesperado.
Resulta que la campaña dirigía a los espectadores hacia una prenda específica: una camiseta blanca con una esvástica impresa en el frente. La camiseta, etiquetada como "HH-01", ha sido identificada por la Liga Antidifamación (ADL) como un código para "Heil Hitler".
La estrategia de marketing de Ye, además de incluir el controversial diseño, incluye una peculiaridad: el anuncio, transmitido sólo en Los Ángeles, Filadelfia y Atlanta, según TMZ, fue grabado con un iPhone, ya que, según el artista, gastó todo su presupuesto en una nueva dentadura.
"Como si necesitáramos más pruebas del antisemitismo de Kanye, eligió poner a la venta un solo artículo en su sitio web: una camiseta con una esvástica", se lee en la declaración de la ADL en X. La organización criticó duramente a Ye por "amplificar" sus comentarios antisemitas en una plataforma tan grande como un anuncio del Super Bowl.
El anuncio no mencionó explícitamente la camiseta, pero días antes, en una serie de publicaciones en X que luego fueron eliminadas, Ye declaró abiertamente su admiración por Adolf Hitler y se autodenominó nazi. Incluso afirmó, según el Daily Record, que la camiseta con la esvástica es "su mayor obra de arte hasta el momento", una afirmación que ha generado indignación y confusión.
A pesar de disculpas previas a la comunidad judía en diciembre de 2023, estos recientes sucesos marcan una nueva escalada en la controversia que rodea a la figura pública, complicando aún más su imagen ante el público.
La controversia ha generado un debate sobre la responsabilidad de las plataformas de publicidad y los límites de la libertad de expresión, generando una discusión sobre el impacto de las acciones de figuras públicas en la sociedad actual.