Sandra Itzel: Rinoplastia con graves consecuencias

La actriz y bailarina Sandra Itzel, conocida por su participación en Las Estrellas Bailan en Hoy, recientemente compartió una experiencia personal que arroja luz sobre los riesgos ocultos detrás de la búsqueda de la belleza. Si bien inicialmente buscó una solución médica a un problema respiratorio, su historia tomó un rumbo inesperado.
Todo comenzó con una rinoplastia funcional. "Me habían dicho que no podía respirar bien, ya me lo había notado mucha gente (...) mis amigos me habían dicho no te escuchas muy bien," explicó Itzel en una entrevista con el matutino Hoy. Sin embargo, aunque la cirugía en sí resultó exitosa desde el punto de vista estético, trajo consigo consecuencias médicas graves.
A los pocos días de la operación, Sandra notó algo inusual. "En la punta de mi nariz comenzaron a salir puntos blancos cuando aún tenía el vendaje," recuerda. Lo que inicialmente pareció algo menor, se convirtió rápidamente en una situación alarmante. "De la una de la tarde a las 9 esos puntitos se convirtieron en manchas regadas verdes."
La actriz describe el pánico que sintió al descubrir que tenía una pre necrosis superficial en la nariz. "Fueron días bien complicados porque pues es algo a lo que no estás preparado, que no esperas, pero pues que pasa," comenta, visiblemente afectada al recordar la experiencia. La preocupación por su salud, sumado al impacto que esto podía tener en su carrera, le causaron gran angustia. "Imagínate al final es tu cara, pues yo soy artista y me dedico a la televisión, a los escenarios. Si no te creas yo lloraba y se me regaban las lágrimas".
Afortunadamente, la intervención médica oportuna permitió controlar la situación. Itzel enfatiza la importancia de la atención médica inmediata ante cualquier señal de alarma: "Actué de manera correcta, seguí un protocolo de fase 10 como si fuera muy grave a mi fase uno". Su caso sirve como un recordatorio sobre la importancia de priorizar la salud y buscar ayuda profesional ante cualquier duda o complicación.
La historia de Sandra Itzel es un ejemplo de cómo una búsqueda de mejora estética puede generar consecuencias inesperadas. La experiencia, aunque traumática, le ha servido como aprendizaje y una advertencia a otros.