Brooke Shields: Bikini, 59 años y un mensaje poderoso

Shields, a sus 59 años, ha compartido una serie de fotografías en su cuenta de Instagram, con más de 2.4 millones de seguidores. Las imágenes, tomadas en una playa, la muestran luciendo un bikini de la marca @indiahicksstyle x @sealevelaustralia, un atuendo que resalta su figura tonificada y —como ella misma lo describe con humor— su "escote". Acompañando las fotos, un pequeño perro marrón se roba la atención en la última imagen, como una "estrella invitada especial", según la divertida descripción de la publicación.
Más allá del impacto visual de las imágenes, la publicación sirve como un vehículo para promocionar dos proyectos importantes. Primero, la presentación de su nuevo traje de baño, una estrategia de marketing inteligente que aprovecha su influencia en redes sociales. Segundo, la promoción de su línea de cuidado capilar, Commence, de la cual Shields es fundadora. En una serie de imágenes adicionales, con un estilo Polaroid, la actriz muestra su cabello brillante y voluminoso, como ejemplo de los beneficios de su producto. "Tu pelo ha cambiado. El cuidado de tu cabello también debería hacerlo. #shopcommence fundada por @brookeshields", se lee en la leyenda.
Este movimiento estratégico en redes sociales coincide con el reciente lanzamiento de sus memorias, "Brooke Shields is Not Allowed to Get Old: Thoughts on Aging as a Woman", un libro que ha generado considerable interés. En él, Shields aborda temas como su experiencia en la industria del modelaje y el impacto en su imagen corporal, su matrimonio con Andre Agassi, e incluso la polémica entrevista de Tom Cruise en la que criticó su uso de antidepresivos. La publicación en Instagram, entonces, se lee como una extensión de este mensaje personal: el control de su propia imagen y la celebración de su evolución.
El libro, publicado en enero, ya ha generado diversas conversaciones, con Shields participando en eventos promocionales, como la charla con Samantha Barry en Nueva York. La publicación en Instagram, lejos de ser solo una simple exhibición veraniega, parece ser una estrategia de marketing multimedia con la que Shields no solo comparte su vida, sino que contribuye a la conversación sobre la imagen corporal y el envejecimiento en la cultura popular, desde una perspectiva única y profundamente personal.