Katy Perry canta "What a Wonderful World" desde el espacio
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Nicol Matuz Scott
El vuelo NS-31 de Blue Origin, marcó un hito con su tripulación completamente femenina: Gayle King, la periodista de CBS; Katy Perry, la icónica cantante pop; Lauren Sánchez, prometida de Jeff Bezos; Aisha Bowe, ex científica de la NASA; Amanda Nguyen, investigadora en bioastronáutica; y Kerianne Flynn, productora de cine. Esta selección, según declaraciones previas de Blue Origin, fue liderada por Sánchez con el objetivo de "inspirar a las generaciones futuras".
A miles de metros de altura, con la Tierra como un impresionante telón de fondo, la experiencia se tornó inolvidable. Después de la ingravidez inicial, según comentó Gayle King en la transmisión en vivo de Blue Origin, Katy Perry, a petición de sus compañeras, decidió cantar. "No iba a cantar una de sus propias canciones; dijo que quería cantar algo por el planeta", relató King. La elección cayó en "What a Wonderful World", un clásico de Louis Armstrong, un detalle significativo que añadió una capa emocional inesperada a la misión.
El regreso a tierra firme fue también significativo. Imágenes difundidas por Blue Origin muestran a Perry, acompañada de su prometido Orlando Bloom y su hija Daisy, quienes observaron el lanzamiento, arrodillándose y besando el suelo. Este gesto espontáneo, cargado de simbolismo, reflejó la profunda conexión con la Tierra que experimentó la tripulación.
La misión, la número 31 de New Shepard y la 11 con tripulación humana, se realizó desde el oeste de Texas. El temor y la emoción, como describió Gayle King en una entrevista con Elle previa al despegue, fueron sensaciones compartidas por todas las integrantes de la tripulación, una aventura que transcendió las expectativas, añadiendo una dimensión humana a la conquista del espacio.
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