Meghan Markle: Maternidad, desafíos y virus respiratorios en sus hijos

Recientemente, Meghan Markle, la Duquesa de Sussex, compartió en el segundo episodio de su podcast, "Confessions of A Female Founder", detalles íntimos de su vida familiar. No se trata de lujos y fastos, sino de una realidad mucho más cercana a la nuestra.
En el podcast, Meghan conversó con Reshma Saujani, fundadora de las organizaciones Girls Who Code y Moms First, sobre la dificultad de conciliar la vida profesional y familiar, particularmente para las mujeres. Fue en este contexto que la Duquesa reveló que sus hijos, el Príncipe Archie (5 años) y la Princesa Lilibet (3 años), habían estado luchando contra un virus respiratorio.
“Mis hijos ahora mismo, uno tiene VSR y el otro tiene gripe A. Por la noche escuchaba sus pasos por la casa y ya sabes, jarabe para la tos toda la noche mientras les acariciaba la espalda,” contó Meghan, describiendo noches llenas de preocupaciones y cuidados maternos.
Más allá de la enfermedad infantil, la conversación abordó temas profundos y sensibles. Meghan y Reshma hablaron sobre la experiencia del aborto espontáneo, un tema que Reshma abordó con apertura y honestidad, compartiendo su propia experiencia personal durante la fundación de Girls Who Code. La conversación giró en torno a la importancia de priorizar la salud mental y física, incluso ante las presiones sociales y profesionales.
En otro punto, Meghan recordó su vida en el Palacio de Kensington, contrastándola con su actual situación. "Sí, habría sido en 2018. Embarazada de Archie en el Palacio de Kensington," recordó al hablar con Reshma sobre su último encuentro. Se trata de un contraste sutil pero potente, entre las expectativas de una vida pública y la intimidad de la maternidad.
El primer episodio del podcast ya había revelado un aspecto crucial de su vida posparto. Meghan confesó haber sufrido preeclampsia posparto, una complicación médica que añadió otra capa de desafío a su experiencia como madre primeriza. "Es tan raro. Y da tanto miedo," explicó, describiendo la dificultad de lidiar con estos problemas en silencio, mientras mantiene una imagen pública impecable.
La narrativa de Meghan, lejos de ser un relato de privilegios, se centra en las experiencias universales de la maternidad y los desafíos que enfrentan las mujeres en el mundo moderno, independientemente de su posición social.