Ximena Navarrete: Últimas vacaciones familiares antes de la llegada de su bebé

En este contexto, Ximena Navarrete, la recordada Miss Universo 2010, ha compartido con sus más de tres millones de seguidores en Instagram, momentos especiales de sus últimas vacaciones familiares. Acompañada de su esposo, Juan Carlos Valladares, y sus dos hijos, Ximenita (3 años) y Juan Carlos Jr. (2 años), la modelo disfruta de sus días finales como familia de cuatro.
Las fotografías, publicadas en su perfil, muestran a la familia en la playa, capturando la esencia de la alegría familiar. "Última vacación siendo 4, estamos listos para recibirte bebé !!!!! ????????????", escribió Ximena junto a una imagen desde la piscina, anticipando la inminente llegada de su tercer hijo, un varoncito, a principios de mayo. Aunque la fecha exacta del parto se mantiene en privado, la emoción es palpable.
La pareja ha preferido mantener en secreto el nombre del bebé, aunque se especula que podría ser un nombre familiar, quizás en honor a algún abuelo o tío. Más allá de los detalles del recién llegado, Ximena ha decidido compartir una reflexión conmovedora sobre su experiencia con el embarazo.
En sus publicaciones, la modelo de 37 años ha mostrado su vulnerabilidad, hablando abiertamente sobre los cambios físicos del embarazo y cómo, a veces, estos la hacen sentir menos segura de sí misma. “Honestamente, estando embarazada no me siento tan cómoda usando bikini y casi siempre me pongo trajes de baño completos… La piel cambia, todo está desacomodado, enorme, gigante, estirado y es normal. Todo regresa!!! O al menos se hace el esfuerzo de que todo regrese a su mejor versión”, confesó.
A pesar de estas inseguridades, Ximena también celebra la capacidad de su cuerpo para crear vida. “Gracias Dios y gracias cuerpo por permitirme dar vida a mis bebés y me pongo el bikini porque estar así por dar vida a mis niños es lo que siempre pedí a Dios. Si amigas también me sale celulitis extra estando embarazada, también tengo el cuerpo enorme en todos sus sentidos y ni modo después a ponernos las pilas para estar sanas y fuertes para dar lo mejor por ellos”, añadió mostrando su gratitud y resiliencia.
Sus publicaciones han generado un diálogo abierto sobre la imagen corporal y la experiencia del embarazo, mostrando a sus seguidores una versión auténtica y vulnerable de sí misma, más allá de la imagen impecable de una Miss Universo.