Eugenio Derbez y Victoria Ruffo: Paz definitiva tras años de conflicto

El paso del tiempo, sin embargo, suele ser el mejor filtro para heridas pasadas, dejando espacio a la madurez y a la reflexión.
Eugenio Derbez, reconocido director y actor mexicano, ha estado en el ojo del huracán durante años por su compleja relación con Victoria Ruffo. Su historia de amor, transformada en una batalla pública por la custodia de su hijo, José Eduardo Derbez, ha dado para cientos de titulares. Los detalles íntimos de sus diferencias, ventilados a través de entrevistas y programas de televisión, alimentaron una vorágine de especulaciones que parecían no tener fin.
Recientemente, en un encuentro con los medios, Derbez abordó la incómoda temática con una sorprendente concisión. Ante las persistentes preguntas de un reportero sobre su opinión de la crianza de José Eduardo y si había felicitado a Ruffo el pasado 10 de mayo, la respuesta de Derbez fue definitiva: “Ya no quiero meterme en problemas con eso, ya hicimos las paces, entonces yo prefiero ya mejor, no.”
La insistencia del periodista sobre una posible felicitación en el Día de las Madres provocó una respuesta aún más tajante: “No, no, no, ya no, ya enterramos las rencillas, entonces ya no, gracias.” Estas declaraciones, lejos de alimentar la polémica, sugieren un giro significativo en la actitud de Derbez frente a este capítulo de su vida.
Más allá de las especulaciones y de la intensa presión mediática, lo que queda claro es el deseo de Derbez de cerrar definitivamente este ciclo. El tiempo, a veces, es el mejor cicatrizante, y en este caso, parece haber promovido un cambio de perspectiva que prioriza la paz y la tranquilidad.
El futuro, en cambio, se presenta como un espacio para nuevas historias, lejos de los reflectores de una disputa que, por fin, parece haber llegado a su fin.