Durante una entrevista en Newsmax, Donald Trump describió a Sean "Diddy" Combs con una frase que ya genera memes: "Básicamente, digamos que era medio inocente". El comentario llegó semanas después de que un jurado declarara al fundador de Bad Boy Records culpable de transporte con intención de prostitución, pero lo exonerara de tráfico sexual y crimen organizado.
Detrás de las palabras ambiguas del exmandatario hay una historia compleja:
- Ambos compartían una relación cercana antes de que Trump entrara a la política
- Combs llegó a organizar fiestas en propiedades de Trump
- La dinámica cambió radicalmente cuando el rapero mostró abiertamente su oposición
Mientras el mundo del espectáculo especula sobre un posible perdón presidencial, los hechos concretos son crudos: el empresario musical enfrenta hasta dos décadas de prisión. La sentencia definitiva se conocerá el 3 de octubre, pero la sombra de la clemencia ejecutiva ya se proyecta sobre el caso.
Trump ha reiterado que analizaría los hechos "sin que influyan simpatías personales", aunque reconoció que Combs "antes me admiraba mucho". La última vez que hablaron fue antes de la campaña presidencial de 2016, cuando según el republicano, el productor "se volvió hostil" hacia él.
