Ana Serradilla vive una maternidad ficticia tras imposibilidad de ser madre

Sin embargo, la actriz ha encontrado una forma inesperada y conmovedora de experimentar ese amor filial: a través de sus personajes.
En una charla íntima con TVNotas, la protagonista de La viuda negra confesó que, aunque al principio fue un duelo difícil, hoy vive una especie de "maternidad ficticia" que le ha llenado de alegría. "En la película Santa, mi amor, la niña que interpretaba a mi hija se convirtió en alguien muy especial. Salimos juntas, la llevo de paseo y hasta le digo: ‘Gracias por hacerme vivir esto’", reveló con una sonrisa.
Pero eso no es todo. Actualmente, Ana está inmersa en dos proyectos donde vuelve a encarnar a madres:
En su vida personal, la actriz de 44 años también ejerce un rol maternal al convivir con los hijos que su esposo, Raúl Martínez Ostos, tuvo en su matrimonio anterior. "Soy madrastra de tiempo completo. Es otra forma de vivir la maternidad, con una familia que no es biológicamente mía pero que quiero como si lo fuera".
El proceso de aceptación no fue fácil. Ana confesó que requirió años de terapia y hasta decidió estudiar Psicología en línea para entender mejor sus emociones. "Mi cuerpo ha sufrido mucho con cirugías. Decidí amarme y dejar de torturarme", concluyó, sin revelar detalles médicos pero dejando claro que priorizó su salud.
Con una carrera que incluye éxitos como Doña Flor y sus dos maridos y más de 20 películas, Serradilla demuestra que, a veces, la vida ofrece consuelos donde menos se esperan. Su historia es un testimonio de resiliencia que, seguramente, resonará en muchas mujeres que enfrentan caminos similares.