México, DF
Actualizan lista de las naciones que cuestionan el paso de personas infectadas.
Aún en 2013, por diferentes circunstancias, la aceptación a personas que son declaradas seropositivas sigue estando marcada por la discriminación, siendo acompañados con una etiqueta indeleble, no sólo por la enfermedad, sino también por intolerancia.
Y este rechazo se manifiesta dentro y fuera; para expresarlo no existen, literalmente, fronteras; hay países que niegan el ingreso o estancia a los enfermos de VIH.
A pesar de los avances de la ciencia en el tratamiento y control de este padecimiento, existen gobiernos que más allá de un auténtico interés por la salud de sus habitantes adoptan medidas con prejuicios o que son discriminatorias contra los extranjeros con inmunodeficiencia que desean ingresar en su territorio.
Esta no aceptación desoye las recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud (OMS) en este ámbito. Dentro de las formas de contagio del VIH nunca se ha hablado de esa especie de propagación que las autoridades de esas naciones quieren encontrar en las personas foráneas con este padecimiento.
En todo el mundo existen 44 territorios que todavía ponen ciertas restricciones para entrar, tener una estancia corta o bien establecerse a personas quienes padecen VIH, según el documento Mapping of Restrictions on the Entry, stay and residence of people living with HIV, realizado por la ONUSIDA.
De esa lista, los países que cuentan con la mayor restricción para la estancia y permanencia a personas con VIH son en su mayoría asiáticos como Brunei, Omán, Emiratos Árabes Unidos; en África, Sudán y Yemen.